¿Qué es un homicidio? Muchos de nosotros nos hemos hecho esta pregunta leyendo la sección de sucesos del periódico. Puede que viendo una serie criminal hayamos torcido la cabeza por su parecido con el delito de asesinato. Vamos a despejar las dudas en este artículo. Además, recuerda que si te interesa este ámbito, puedes matricularte en nuestro curso de Criminología e Investigación Criminal, certificado por la Universidad Pontificia de Salamanca.
La principal diferencia entre un homicidio y un asesinato es la intención. La persona acusada de homicidio no tuvo intención de matar a la víctima. En cambio, un acusado de asesinato sí que tenía la intención de terminar con la vida de la otra persona. El Código Penal, no obstante, entra en más detalles. A continuación, te contamos los rasgos más esenciales del crimen de homicidio.
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¿Qué es un homicidio? Lo que dice el Código Penal
Cuando nos preguntemos qué es un homicidio, deberemos tener en cuenta la intencionalidad del crimen cometido. Un homicidio consiste en cometer una acción que termina con la vida de otra persona, sin que sea esta su intención. El Código Penal no establece ninguna distinción sobre la forma en que se comete este crimen, a diferencia de lo que sucede con el delito de asesinato.
Tipos de homicidio
Según las circunstancias, podemos diferenciar entre varios tipos distintos:
Homicidio doloso
El homicidio doloso es el más fácil de confundir con otros delitos, tanto el delito de lesiones como el de asesinato. Se considera homicidio doloso cuando hay conocimiento y voluntad de matar a otro al provocar un peligro jurídicamente desaprobado para la víctima. En cambio, el autor de un delito de lesiones no tiene la intención de causar la muerte de otro.
El Código Penal contempla también un homicidio agravado en los siguientes casos:
- Cuando la víctima es menor de 16 años o vulnerable por razones de edad, enfermedad o discapacidad.
- Cuando el homicidio se lleve a cabo tras cometer un delito contra la libertad sexual que el autor hubiera cometido sobre la víctima.
- Si el autor es miembro de una organización criminal.
- Si los hechos constituyen también un atentado contra la autoridad, sus agentes o los funcionarios públicos.
Homicidio imprudente
Hablaremos de un homicidio imprudente si la muerte de la víctima es fruto de una imprudencia cometida por el autor. Esto ocurre cuando el autor infringe su deber de cuidado, y cuenta con dos subtipos:
Homicidio por imprudencia grave
Puede cometerse utilizando un vehículo, arma de fuego o incluso constituir una imprudencia de tipo profesional. Estos delitos conllevan, además, otras penas: prohibición de conducir, de la tenencia de armas o una inhabilitación profesional, por ejemplo.
En función de la gravedad de los hechos y del número de personas que se vean afectadas por esta imprudencia, se aplicará un subtipo hiperagravado.
Homicidio por imprudencia menos grave
El homicidio por imprudencia menos grave puede cometerse usando un vehículo, un arma de fuego o ser una imprudencia profesional. Se trata de las mismas circunstancias que con el homicidio por imprudencia grave. Sin embargo, en este caso es el juez quien decide si los hechos son lo suficientemente importantes como para considerarlos graves.
Homicidio preterintencional
Este tipo de homicidio no aparece en el Código Penal, aunque se ha usado en varias ocasiones. Se dice que un homicidio es preterintencional cuando no puede clasificarse en ninguno de los supuestos anteriores.
Por poner un ejemplo: hablaremos de homicidio preterintencional si alguien quiere lesionar a otro, pero en su lugar le causa la muerte. La intención del autor no era matar a la víctima.
Como hemos podido ver, el homicidio se produce cuando no hay intención de matar a la víctima, y el asesinato se produce cuando sí hay esta intención. Esperamos que este artículo te sirva para entender mejor como se clasifica este delito y comprender los entresijos del lenguaje judicial, al menos un poco. Y si te interesa este ámbito, echa un vistazo antes de irte a nuestro curso de Criminología e Investigación Criminal, certificado por la Universidad Pontificia de Salamanca.