Una asociación sin ánimo de lucro lleva a cabo una misión que repercute positivamente en la sociedad, sin buscar un beneficio monetario. A continuación, te contamos qué requisitos cumplen las entidades sin fines lucrativos, cómo se crean y también vemos algunos ejemplos de este tipo de asociaciones. Si lo que quieres es formarte profesionalmente en este sector, puedes realizar el curso en dirección y gestión de asociaciones y ONG que impartimos en Grupo Esneca Formación.

¿Qué es una asociación sin ánimo de lucro?

Una asociación sin ánimo de lucro está integrada por un grupo de personas que se unen para lograr un mismo fin. En este sentido, cabe destacar que la meta del proyecto no es obtener un beneficio económico personal, sino la búsqueda del bien común. Es decir, es un tipo de asociación que tiene una motivación social, cultural o humanitaria.

Se trata de una organización que posee su propia forma jurídica. por lo que adquiere compromisos y responsabilidades. Estas son las características principales de las entidades sin ánimo de lucro:

1. Un proyecto con implicación social

Es una organización que persigue un objetivo que influye positivamente en el bien de la comunidad. Es decir, mejora la calidad de vida de un grupo de personas y los beneficios obtenidos se destinan de forma integral a la misión inicial.

2. Número de socios fundadores

Se trata de una agrupación que está formada por tres o más personas. Todas ellas persiguen un mismo propósito, a través de un plan de acción compartido.

3. Estatutos de la asociación sin ánimo de lucro

Las obligaciones, responsabilidades y estructura de una entidad sin ánimo de lucro quedan recogidas en sus estatutos. Los socios se comprometen libremente con el cumplimiento de los datos indicados en el texto.

4. Una estructura democrática

En cualquiera de los tipos de ONG que existen, varias personas se unen para impulsar un proyecto común. Pues bien, el funcionamiento de la asociación es totalmente democrático. Una premisa que influye positivamente en la toma de decisiones. De este modo, en función del número de votos, se tiene en cuenta aquello que ha decidido la mayoría.

5. Posee un nombre propio

Existen distintas asociaciones sin fines de lucro, pero cada una se diferencia de las demás. La organización queda identificada a través de su denominación social. La elección del nombre no debe dar lugar a ningún tipo de confusión. Es decir, debe distinguirse con claridad de cualquier otro proyecto existente en la actualidad.

Cómo crear una entidad sin ánimo de lucro

Para crear una asociación sin ánimo de lucro es indispensable definir las bases y los objetivos del proyecto y plasmarlo en un documento oficial que formalice la acción a desarrollar. A partir de ahí, la junta directiva de la entidad se encargará de difundir la creación de la iniciativa para darla a conocer en la sociedad y llevará a cabo las acciones necesarias que lleven a los fines establecidos. Veamos cómo se materializa todo ello paso a paso:

1. Clarificación de los puntos más importantes del proyecto

Las bases de la asociación deben quedar perfectamente definidas en sus puntos principales. Por ejemplo, es importante señalar cuál es el fin esencial e indicar a qué grupo se dirige, así como qué actividades va a llevar a cabo. Antes de impulsar el proyecto en la práctica, es importante darle forma.

2. Firma del acta fundacional

Es un documento que pone de manifiesto la decisión que los socios han tomado respecto al proyecto y donde manifiestan su compromiso con un objetivo común. Es decir, los datos más relevantes del acuerdo deben formalizarse por escrito. En dicho texto debe constar también la fecha en que se produce el acuerdo.

3. Inscripción en el Registro de Asociaciones

Es imprescindible que el proyecto se dé a conocer y que comunique su misión a la sociedad. Por ello, debe estar inscrito en el Registro de Asociaciones vinculado con el territorio en el que se enmarca. Para la realización de esta gestión, es necesario presentar información relativa al proyecto.

4. Junta directiva de la asociación sin ánimo de lucro

Destaca el rol de los siguientes participantes en la junta: el presidente, el vicepresidente y el secretario. También está representado el cargo de tesorero.

Finalmente, es aconsejable proceder a la creación de una cuenta corriente vinculada con la asociación. Es posible que durante la fase de creación surjan dudas entre los socios y, por ello, conviene consultar cualquier cuestión legal antes de firmar un documento. Es decir, antes de asumir una responsabilidad definitiva con el proyecto.

Obligaciones fiscales

Una asociación sin fines de lucro posee su forma jurídica y, en  consecuencia, debe asumir una serie de obligaciones. Estas son las principales responsabilidades fiscales que una asociación sin ánimo de lucro debe cumplir en la sociedad actual.

1. La cantidad obtenida nunca se reparte entre los socios. El destino final se alinea con el cumplimiento de la misión principal. Por tanto, si la entidad obtiene beneficios, estos se destinan íntegramente al fin esencial que lleva a cabo.

2. Manejo transparente de las donaciones. Conviene puntualizar que el proyecto puede recibir el apoyo de quienes realizan sus donaciones para colaborar con la causa. No obstante, esas aportaciones deben quedar integradas en la contabilidad de la asociación sin ánimo de lucro y gestionarse de forma transparente.

3. Gestión contable. Es una de las obligaciones fiscales más importantes que debe asumir la asociación. En definitiva, debe realizarse un seguimiento detallado de la situación anual y deben completarse los libros de cuentas.

Ejemplos de organizaciones sin fines de lucro

Existen distintas organizaciones sin ánimo de lucro que son un ejemplo en la sociedad, ya que desarrollan proyectos que se alienan con causas que persiguen el bien común:

  • El equipo de Médicos Sin Fronteras realiza una importante labor humanitaria en entornos vulnerables.
  • Por otra parte, Unicef defiende los derechos de niños y niñas en todo el mundo.
  • Otro ejemplo es Igualdad Animal, que promueve los valores del respeto y la compasión hacia los animales.
  • También es muy popular Greenpeace, una organización ecologista que desarrolla acciones positivas para el cuidado del medioambiente.
  • Por su parte, Amnistia Internacional defiende los derechos humanos.

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